Nunca me gustaron los triángulos amorosos, nunca se me dieron bien. No creo en mis posibilidades. Siempre dejo que se vayan con el otro. Soy un perdedor nato.
Necesito redimirme y he puesto mi energía en ello. Como ya soy buen chico quiero convertirme en buen amante, me puesto a hincar los codos. Al principio no me costó mucho: Capítulo uno: La energía sexual masculina está almacenada en su semilla. Uno de los secretos taoístas del amor, es la negación de la eyaculación con lo que evitamos la pérdida de energías y, lo que es más importante, te echas unos polvos de escándalo. Tras ese buen consejo decidí dejar de hacer lascivas visitas a páginas porno y no toquetearme mucho en la ducha. Todo fue bien hasta que conocí a Beta y a Rossana.
Estaba profundizando en mis enseñanzas orientales; incienso quemado, luz tenue, y respiraciones profundas para ver si era capaz de inspirar con los huevos, se supone que tus huevos suben y bajan y tus energías van directas al cerebelo. Estaba a punto de conseguirlo, mis huevos dejaban de dar campanazos para fluir energía ascendente, pero mi séptimo sentido me dijo que abriera los ojos. Allí estaban, divinas. Aunque me gusta mirar mucho por la ventana no me controlo al personal. Mi salida a la ventana es más una búsqueda de consejo a los vientos que por puro cotilleo. Cuando me dí cuenta de lo que estaban viendo mis ojos, mi mano y mi polla me llevaban unos centimetros de ventaja. ¡Dos mujeres desnudas dedicándose con pleitesía a todos los poros de su cuerpo! Yo las llamé Beta y Rossana. Beta venía de Grecia y tenía la nariz cortada, era delgadita y finita de cara, con el pelo corto y el pubis belludo. Rossana era italina, con carácter, fuerte y tetuda, morena y peleona.
Apretaba los puños por no cogerme la pinga, pero esos lametones... aquellos pezones... me la tenía saturada, se agarraban a la diosa venus, a ver quién era más bruta, se mordían los labios, se reían y se abrazaban dejándose la piel. Yo tuve que dejar el tao por una temporada, seguí estudiándo pero el propósito de no malgastar energía sexual lo olvidé por completo.
Beta, Rossana y yo teníamos una cita. Solía ser sobre las ocho, llegadas de la uni, después de la ducha y en tiempo de las cremitas. Eran dos hermosas niñas recién enamoradas que guardaban el secreto a sus compañeras de vivienda. Ellas no tardaron en pillarme mirándolas y me abrieron las cortinas, les encantaba verme en esa postura oriental, entre velas, machacándomela sin parar con el fin de aguantar.
Últimamente no me va mal, las observo sin miedo, disfrutando de su cuerpo, haciéndomelo, desde mi ventana, con ellas…; por lo menos aguanto media hora, que no es moco de pavo, porque…si…realmente… os contase… todo lo que veo…¡Buf! Me enciendo…
Ahora, puedo decir que me gustan los triángulos.
¡Qué me encantan!
6.07.2007
flexiones e inflexiones
Yo, con casi todas mis facultades mermadas, con el ánimo entumecido, con esa frustación que es la vida, aburrido y cansado de los de siempre, triste por cómo acontecen las cosas en este planeta, feliz de estar vivo, feliz de estar contigo; quiero hacer presente mi declaración de intenciones:
-No quiero miles de envoltorios, de bolsas de pástico, de papeles,de tapitas y de tapones.
1.2.3.................................Decláraciones de intenciones, aquí:
-No quiero miles de envoltorios, de bolsas de pástico, de papeles,de tapitas y de tapones.
1.2.3.................................Decláraciones de intenciones, aquí:
6.06.2007
historias de mi ventana
El frío comienza a congelar la ciudad, me soplo las manos, te busco entre la gente, entre los abrigos y los paraguas, te busco entre bufandas a que pases por mi calle. Mi calle Victoria. Te espero desde que amanece hasta que se pone el sol por las antenas. Desde que anochece hasta que sale el hombre de la manguera. Hago dibujillos en el vaho y saco siempre la misma foto, un luminoso que reza hotel y una calle entristecida por los vientos del norte. Pero tu no sales en ninguna. Sólo hay caras cabizbajas que miran por donde pisan, gente corriente, gente que miente, otros que ríen y que se pierden…hay un poco de todo y de todos, ninguna eras tú. Tengo miedo de olvidarte. De no acordarme como era tu cara , de la manera de la que andas. Tengo pánico de haberte visto y no reconocido, por culpa de tus ropajes. Echo de menos tus andares andaluces y tu escote que desde el cuarto piso se veía tan bonito. Tengo miedo de que hayas olvidado la vez que me sonreíste, que miraste para arriba y yo sólo pude saludarte. Es una pena que ese día no te hubieses enamorado, tengo miedo de que lo hayas olvidado…
6.05.2007
ruido
con un poco de optimismo
Lo inútil inunda todo lo que hago, la lentitud, la parsimonia por una vida mejor, la falta de motivación, el kaos, la entropía, las baterías descargadas, la mirada perdida en la mancha de una camisa…El tiempo no corre, no vuela, no coge el tren, no tiene parada, ni estación…la letanía, la búsqueda de la sonrisa, la trampa del porvenir, el futuro sin retorno, las enfermedades, las arrugas, los hongos, las arterias bloqueadas de colesterol, el cancer de mama, las almorranas y la cocina sin limpiar… ideas alopécicas, aburridas, las mismas expresiones, la misma agua de borrajas que cuece nuestros planes, la piedra de sísifo se erosiona, la guerra sin combatientes…Lloran las palabras, las almas descarriadas, las flores cuando las arrancas, llora la llovizna sobre nuestra almohada.
La única salida es encerrarse, la única señal es la amarilla, la única esperanza la derrota…Toco la guitarra, toco fondo, te toco un poco, me miro la barriga…Y todo da vueltas, todo se arremolina, coge fuerza, energía centrípeta, se lía y relía para volver al mismo puto punto: Lo inútil lo inunda todo.
La única salida es encerrarse, la única señal es la amarilla, la única esperanza la derrota…Toco la guitarra, toco fondo, te toco un poco, me miro la barriga…Y todo da vueltas, todo se arremolina, coge fuerza, energía centrípeta, se lía y relía para volver al mismo puto punto: Lo inútil lo inunda todo.
6.04.2007
dando la luz
comienzo en minúsculas porque no sé cuanto durará esto, empezamos muchas frases que nunca acabarán... las maravillosas palabras del Asier hacen que me arranque en un ejercicio de vanidad, yo también quiero aburrir al personal. Me encanta leer cosas de la gente, sobretodo si conozco a sus autores, sobretodo si no son muy largas...Te invito pues a una orgía de palabras, al derroche de improperios, a la ironía absurda, al comentario gamberro, a la cosa hortera. Aunque se que tu tiempo es oro te ofrezco las letras gratis y te compadezco por tu absurda afición a leer cosas de la peña.
besos y membrillos.
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